Desde surfear en una isla artificial o aprender a hacer parkour hasta tatuarse y descubrir los secretos del maquillaje de efectos especiales. El Festival de tendencias urbanas MULAFEST -que se ha celebrado en la Feria de Madrid esta semana- atrae la atención de miles de aficionados de todo el mundo a las distintas disciplinas underground. La edición de este año ha contado con el deporte urbano como eje central del festival.
El festival -por el que pasaron el año pasado cerca de 25.000 visitantes- ha celebrado en Ifema durante cuatro días la cultura urbana. El evento cerrará esta noche a las doce con una fiesta de despedida que pondrá punto y final a una programación dilatada.
Las incorporaciones más destacadas de esta nueva edición ha sido la música en directo y los deportes extremos, aunque también se han incorporado nuevas disciplinas como el microteatro, además de actividades relacionadas con el mundo del tattoo, el graffiti o el motor.
La ciudad, un mundo nuevo de posibilidades
El deporte urbano invade el espacio público y lo transforma, dotando a las ciudades de vida. Las actividades a pie de calle modifican el entorno y le otorgan una nueva concepción. Las urbes se convierten en escenarios improvisados para el deporte y sus elementos urbanos pasan a tener nuevas utilidades adquiridas.
Los riders toman la ciudad y Mulafest ha sido su punto de encuentro este fin de semana, donde se han celebrado multitud de talleres y exhibiciones.
Los seguidores del BMX han contado con uno de los mejores BikeParks, montado expresamente para la ocasión, con un total de doce módulos. Para aprovechar las imágenes impactantes que deja este deporte, el festival ha organizado un curso de fotografía en movimiento.
Se ha habilitado también un espacio dedicado al skate en el que se han celebrado competiciones en diferentes categorías y se han dado cita los patinadores de disciplinas como slalom, freeskate, agresivo y roller derby.
Esta edición ha contado también con un espacio dedicado al Street Workout, una disciplina importada de Estados Unidos que cuenta cada vez con más adeptos. Consiste en concebir la ciudad como un gran gimnasio y ejercitarse a partir del mobiliario público, como alternativa a las tradicionales máquinas.
Mulafest se ha impuesto a las limitaciones geográficas con la instalación de una isla artificial de más de 1000 metros cuadrados. Se ha concebido con la zona de relax del festival; en la que la música en directo a cargo de los DJ’s se ha alternado con el desarrollo de actividades como vóley, surf, slackline, bádminton, danza y parkour.
La isla, una de las instalaciones estrella del festival, será el escenario que acogerá la fiesta de despedida que cerrará esta edición hoy por la noche.
El baloncesto a pie de calle también ha tenido su lugar en el festival, que ha organizado durante estos cuatro días distintas exhibiciones a cargo de profesionales y campeonatos en varias modalidades como 3×3, repetición y mates.
Un lugar para la tecnología: M-Make
Mulafest ha sido también punto de encuentro de diferentes agentes de la escena maker española -o el coloquial háztelo tú mismo-, donde el protagonismo ha recaído en la impresión en 3D. Se han realizado distintas muestras de montaje de esas impresoras y demostraciones del proceso de modelado e impresión.
Arte de vanguardia
Las nuevas disciplinas artísticas como los tatuajes y los graffitis también han estado presentes en el festival.
Los profesionales y amantes del mundo del tattoo han podido disfrutar en directo del trabajo de algunos de los artistas nacionales e internacionales más destacados. El festival ha acogido la Madrid Tattoo Convention y ha organizado algunas actividades entorno al mundo del bodypainting y el maquillaje FX.
Además, los artistas urbanos se han encargado de la ambientación del recinto con distintas intervenciones interiores y exteriores. En la iniciativa han participado colectivos como BoaMistura o Lana Connection.
Se han realizado también talleres colectivos de graffiti y un homenaje al primer escritor de graffiti español, Muelle, de quien se ha expuesto uno de los dos únicos murales que se conservan.